Vi algunos videos de cuando mis hermanos y yo éramos niños. Descubrí que los pocos recuerdos sobre mi infancia -o lo que yo creí que eran recuerdos de mi infancia-, sólo eran la memoria de estos mismos videos que ya había visto hace mucho tiempo. En realidad, tengo muy pocos recuerdos, y ahora me doy cuenta que muchos de ellos pertenecen a estos videos que tomaba mi papá. No sé qué pensar. Si alguna vez tengo hijos, documentaré su infancia completa, tal vez me lo agradezcan cuando intenten acordarse de su pasado, o pensarán que fui una obsesiva de la cámara, lo cual no me convierte en fotógrafa.
¿En dónde estarán almacenadas nuestras vivencias infantiles? ¿Qué podría hacer para que en unos años no se me olvide lo que he vivido últimamente? Es muy matado sentir que tienes que tomarle foto a todo lo que te gusta, como lo que me pasó en NY, literalmente conocí nuevos lugares a través de la cámara, tomé más de mil fotos en una semana. No me arrepiento.
Foto: Henri Cartier-Bresson
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